De vuelta a casa con mi beb?, ?qu? hago?
Muchas mujeres se ven en figurillas o en ocasiones desconcertadas cuando dan a luz y retornan a sus hogares con el beb? en brazos. Algunas reciben apoyo de las abuelas, o alg?n familiar cercano, pero es el instinto materno el que debe seguirse. Crear un lazo de amor y ternura entre la madre y el beb? ayudar? al crecimiento y desarrollo adecuado. Es una etapa donde la mujer descubre su verdadero rol: Ser madre.
Para m?s detalle al respecto, conversamos con el Dr. Claudio Di Martino, especialista en Neonatolog?a.

En general, el beb? y su madre son dados de alta al tercer d?a del nacimiento. Es un momento clave puesto que el neonato est? cambiando su comportamiento y adecu?ndose a la vida. La madre “abandona” la protecci?n del Hospital y debe enfrentarse al cuidado del ni?o con frecuencia sin estar adecuadamente preparada.

La madre se encuentra dolorida por la episiotom?a o la ces?rea y no puede sentarse con comodidad ni tampoco deambular sin molestias. Sus pechos se encuentran doloridos y su cabeza est? llena de dudas e incertidumbres. Esto hace que se encuentre sensible, f?cilmente llora y su estado emocional es fr?gil.

Es justamente cuando ella necesita de apoyo. Su pareja y el entorno familiar deben ofrecer su colaboraci?n para que ella pueda cumplir a cabalidad su rol. Somos humanos y limitados pero a?n as? buscamos el bien com?n del binomio madre-hijo. ?sta relaci?n se ir? fortaleciendo con dos ingredientes b?sicos: la paciencia y el cari?.

El pap? debe dar sost?n y seguridad a la madre que se encuentra muy necesitada de apoyo. Deber?a apuntalar su maternidad y evitar de alguna manera las cr?ticas f?ciles, muchas veces bien intencionadas pero perjudiciales a como la madre atiende al beb?. Toda la familia deber?a colaborar no para remplazar la tarea de la madre sino para que esta tarea de 24 horas al d?a todos los d?as, permita un desgaste menor de la mam?. Las abuelas y otros familiares deben ayudar cuando ella regresa del hospital. Si la madre tiene “ayuda” las criaturas duermen m?s, toman mejor el pecho materno y su dedicaci?n al beb? ser? m?s completa mientras otros hacen una tarea complementaria en la casa.

Esto no es contradictorio con las posibles influencias “externas”. Es un trabajo en equipo que permite mejores resultados. Este es un camino que recorrer con los ojos abiertos y con el coraz?n dispuesto a aprender, estando atentos a la amplia gama de cambios que se van sucediendo sin interrupci?n.

Primeras reacciones del beb?
No hay reglas fijas. Puede defecar una vez al d?a o despu?s de cada mamada. Puede regurgitar despu?s de mamar, situaci?n bastante frecuente. En ocasiones vomita, puede tener c?licos, cambia la noche por el d?a (acaso ?l lo sabe??) y llora, y uno se encuentra pregunt?ndose que le pasa. TODO ESTO PUEDE SER NORMAL y no un motivo de alarma.
La madre debe prestar atenci?n si:

Al nacer, debe mostrarse el ni?o a su madre antes de iniciar los procedimientos habituales de recepci?n neonatal. A los ni?os sanos ? que son la gran mayor?a ? se deber?a llevarlos lo antes posible a la habitaci?n de los padres para que puedan gozar con su presencia e iniciar una relaci?n que crezca a medida que se estimulen los contactos, visuales, auditivos y t?ctiles.

Los primeros d?as de su vida la criatura experimenta emociones que ser?n b?sicas para su desarrollo. Identifica la seguridad que le brinda su madre y goza de su primera experiencia al recibir la leche materna puesto que antes se nutr?a a trav?s del cord?n umbilical. Esta es la primera lecci?n de Amor y el neonato necesita de ese momento.

Cuando hablamos de las caracter?sticas de los reci?n nacidos debemos entender muy bien que cada uno es ?nico y que generalizar no nos ayuda a enfrentar cada situaci?n espec?fica. Es por eso que no hay reglas absolutas. Las respuestas generales pueden ser aproximadas pero no exactas para cada individuo. Para comprender las especiales caracter?sticas de cada beb?, se requiere observar atentamente sus reacciones. Cu?les son sus periodos de reposo y vigilia, c?mo le gusta ser alzado, c?mo se calma cuando est? enojado. Tantos interrogantes ser?n descubiertos por la madre a medida que lo vaya conociendo, valorando adem?s su condici?n de mujer y madre.

Es muy importante ayudar a las madres a saber c?mo son sus hijos, dado que cuanto m?s sepan se sentir?n m?s confiadas en su criterio y descubrir?n la plenitud de la maternidad. Aqu? debemos se?alar que la madre se ver? “bombardeada” por consejos de c?mo cuidar a su beb?. Numerosos consejeros bien intencionados aparecen pero la madre debe sentirse libre, asumir su propia responsabilidad teniendo mucha fe en su capacidad y resolver los problemas siguiendo su instinto. Este comportamiento beneficia al beb? puesto que se siente seguro en las manos de su madre y que hay alguien dispuesto a brindarse por entero para ayudarlo a crecer. La mujer no deber?a sentirse abrumada por esta responsabilidad. Es innato este mecanismo en la mujer y se va perfeccionando con el transcurrir del tiempo. No deber?a dejarse presionar por el entorno. Es preferible que ella se equivoque a que siga un consejo fruto de la experiencia ajena que no se ajusta a las necesidades de su ni?o.

Muchas mam?s ven a su hijo desnudo por primera vez cuando vuelven a su casa. Esto no deber?a suceder- Adem?s, no est?n sabiendo c?mo actuar para darle el pecho o como prepararle la f?rmula con leche en biber?n. Esta falta de contacto durante su estad?a en el hospital le restringe su visi?n global. Se ha perdido una buena ocasi?n para hacer un entrenamiento intensivo.
Cuidados en casa

El pediatra le solicitar? los estudios y controles que debe realizar el neonato y le sugerir? la frecuencia de las consultas de control y cuando aplicarse las vacunas. Recurra a ?l cuando surjan dudas. Tenga confianza en su criterio y el asesoramiento que le brinda.

Dr. Claudio Di Martino
Pediatr?a y Perinatolog?a / Reg. N? 1643